Yo en tus ojos;
eso fue lo que me hizo parar el miedo de mi futuro incierto.
Yo, en tus ojos;
como un candoroso juguete de frágil hielo
sentado en el abismo de tu iris perpetuo
blandiendo el horizonte, para abatir falsos anhelos.
Yo en tus labios,
seguro de que un país perfecto se esconde tras tus besos.
Yo, en tus labios,
dormitando una pasión que huye del secreto.
Recreando atardeceres
inventando sortilegios.
Yo, en tus manos,
a tu merced, quedo, esclavo de tus dedos.
Yo en tus manos,
amanezco, rompo a sangrar en versos.
Vivo y pienso
Sueño y duermo
Río y cayo
Salto y vuelo
Respiro, siento y padezco….